Así que te has dado cuenta o ya te has enfrentado a la necesidad de aprender la lengua rusa. ¿Qué elegir: la tutoría? ¿O tal vez deberías irte al extranjero y “ya te llegará”? En la era de la sobrecarga de información, parece que puede hacerlo fácilmente por su cuenta. ¿Qué otra cosa podría ser, “has sido baneado por Google”? Puedes aprender ruso por tu cuenta.
Puedes comprar o descargar cualquier libro de texto, puedes escuchar millones de horas de podcasts, ver películas con subtítulos y comunicarte con cualquier persona en foros y videollamadas. Eso parece, la inmersión lingüística sin salir de casa. Nosotros mismos estamos a favor de estas formas de aprender idiomas. Pero hay un “pero”.
¿Cuántas personas son capaces de crearse un plan de aprendizaje, elegir una metodología y un método, hacer un plan concreto y cumplirlo? Y responde con sinceridad, ¿perteneces a este tipo de personas hiperresponsables?
No cabe duda de que los autodidactas existen, y hay bastantes personas en el mundo que han aprendido ruso desde cero por su cuenta. Pero su experiencia demuestra que es a) un camino más largo y b) a menudo más difícil.
En otras palabras, si crees que aprender un idioma por tu cuenta es más rápido y fácil que hacer un curso o con un profesor, te equivocas. Y la razón de ello son probablemente las experiencias negativas, las suyas y las de sus seres queridos. De hecho, no se puede prescindir de profesores y metodólogos profesionales. Con su ayuda:
- No se ahogue en un mar de información única;
- Podrá separar lo principal de lo secundario;
- Conocerás claramente tus puntos fuertes y débiles;
- Decidir la metodología, el ritmo y el estilo de aprendizaje en lugar de apresurarse a probarlo todo;
- Sus clases serán estructuradas y sistemáticas;
- Podrás interactuar en directo con hablantes nativos, que serán auténticos profesores;
- Y al estudiar en grupo, estarás motivado gracias al elemento competitivo.
Y estas son sólo las ventajas que se encuentran en la superficie. Entrando en detalles, hay ventajas tanto en el estudio en grupo como en el trabajo con un tutor/mentor/tutor (¡como se dice ahora!). Las clases presenciales aumentan la disciplina y ayudan a combatir la procrastinación, mientras que una profesora de ruso puede ahorrar tiempo explicando “con los dedos” lo que es problemático para buscar en Google.
¿Cuánto tiempo se tarda en aprender ruso por cuenta propia? ¿Y cómo me califico a mí mismo?
El nivel de competencia lingüística se determina según las clasificaciones del MCER. El sistema es muy democrático y abarca todos los niveles: desde el “cero” hasta el nivel “como nativo”. Aunque tengas un vago recuerdo del currículo escolar, conozcas el alfabeto y algunas frases, ya tienes al menos el nivel A1 (principiante). No es necesario realizar un examen internacional para conocer o confirmar su nivel. Puede realizar la prueba de nivel de ruso en nuestro sitio web de forma gratuita.
Una evaluación adecuada según las normas internacionales es importante para elaborar su plan de estudios y por razones pragmáticas. Además, si tiene previsto trabajar con clientes extranjeros o para una empresa internacional, un nivel “confirmado” le distinguirá instantáneamente de la competencia: en España, sólo un pequeño porcentaje de la población domina el ruso.
¿Cursos extensivos o intensivos?
Si te decides a hacer un curso, infórmate de los plazos. ¿Cuánto tiempo necesita para estudiar, no en general, sino personalmente? ¿Es mejor hacer cursos serios u optar por un curso intensivo y estudiar todo lo posible de forma exprés?
Los cursos desaniman a algunos estudiantes por su duración: muchas escuelas ofrecen “maratones” de un año o incluso dos de duración. Pero lo mismo ocurre con los cursos intensivos: ¡puedes dominar toda la gramática rusa en 1 mes!
Los especialistas recomiendan elegir cursos completos para aquellos que aún no han alcanzado el nivel intermedio alto. Si ya ha superado esta marca, puede optar por cursos más específicos: puede ser un intensivo de ruso comercial, clases de ruso conversacional, etc. En los niveles superiores puedes concentrarte en tareas específicas. Sobre todo si necesita el idioma para trabajar: ir a formaciones, aprender vocabulario por sectores, etc.
¿Cómo funcionan los cursos en nuestra escuela?
Hemos creado nuestra propia metodología de enseñanza dirigida a los hablantes nativos de español. ¿Se ha dado cuenta de que pocos de nuestros compatriotas saben ruso a un nivel adecuado y de cuánto tiempo dedican a “conquistarlo”? La razón es el enfoque equivocado del aprendizaje.
En nuestra escuela se hace hincapié en la práctica de la conversación y se trabajan todos los temas gramaticales de forma oral.
Todo método es un conjunto de técnicas; aquí están dos de las más interesantes.
Aprendizaje basado en tareas: el método de la tarea comunicativa.
El método de “aprendizaje basado en tareas” (TBL) consiste en poner a los alumnos en una situación comunicativa y pedirles que realicen una tarea. En pocas palabras, se reproduce cualquier situación de la vida, pero se habla en la lengua de destino. Esto incluye la consabida charla, el registro en un hotel, el paso por la aduana, en una palabra, cualquier cosa.
El TBL es una de las tendencias clave en la enseñanza de lenguas extranjeras en los últimos años, y en nuestra escuela se ha utilizado desde su fundación. A diferencia de muchas escuelas y universidades, no te gritarán por los errores gramaticales. Lo principal es romper la barrera del idioma y hacerse entender.
Blended Learning ー Aprendizaje híbrido
El aprendizaje híbrido es una cierta mezcla de tecnologías de aprendizaje tradicionales y en línea. El término “blended learning” se escucha en los círculos educativos, pero no todos son capaces de aplicarlo en la práctica. La cuarentena del año pasado demostró que conectarse puede ser doloroso y el aprendizaje ineficaz. No se trata sólo de trasladar la mitad de las clases para que entren y salgan del aula. No se trata sólo de trasladar la mitad de las clases al zoom, sino de un sistema mucho más sutil y flexible.
Nuestros alumnos consiguen resultados tangibles gracias a unos principios sencillos:
- sistemas lógicos ー en lugar de reglas inconexas;
- técnicas mnemotécnicas ー en lugar de aprendizaje memorístico;
- práctica conversacional: practicar oralmente cada tema gramatical;
- desarrollo de habilidades blandas (habilidades de comunicación con extranjeros).
Pero lo más importante, por supuesto, es la motivación. Tienes que entender por qué has venido a aprender el idioma. No se viene al curso sólo para “marcar una casilla”, hay que tener un argumento sólido: necesito el idioma para esto y aquello, para hacer lo otro. Y sí, ¡sólo el amor por las lenguas extranjeras también es un argumento! No todo el mundo puede presumir de una auténtica pasión por otras culturas.